Pero cuéntame el final, que la parte triste ya me la se...

¡Hola caracola! ¿Qué tal estáis disfrutando las vacaciones de navidad? Aquí os dejo unas fotos que me hice ayer. Sí, lo sé, mucho aburrimiento. Pero que le voy a hacer, ¡soy una fanática de las fotos! Bueno, bueno, bueno. Hoy estoy contenta porque voy a ver a mis primitas de Cádiz a las que llevo mucho tiempo sin ver. Bueno, hoy he recordado eso que dicen de que los géminis somos bipolares y, oye, es muy pero que muy cierto. Ayer escribí un texto algo triste y miradme ahora, estoy más feliz que nadie. Y además no es algo que me haya pasado exactamente(lo del texto, digo). Algo sí, pero no tanto. Sí, soy experta en exagerar las cosas jaja. Bueeno, pues aquí os dejo las fotos y el texto que escribí ayer. 

No me cansaré de decíroslo: ¡Feliz Navidad!

Por cierto, el título de esta entrada es de la película Camino. Una de las películas más tristes que he visto en toda mi vida. Si os encanta llorar en películas os la recomiendo. Pero es demasiado triste! Si queréis saber de que va, ponédmelo en un comentario y en la siguiente entrada os lo diré. MUAAAK

¿Y qué pasa cuando sientes que ya no hay nada que perder? ¿Cuando te sientes al borde del abismo pero no te importaría caerte? Te sientes vacía. Y sientes que todo lo que hay a tu alrededor no importa. Y lo único que quieres es beber, emborracharte día sí y día también. ¿Qué estoy mal gastando mi vida? Me la suda. Y besas cualquier boca que se cruza por tu camino y te da igual que esa boca se halla pillado por ti. Pero, de repente, un mensaje. “Te echo de menos, ¿te veo dónde siempre?” ¿Y se supone que debería sentirme bien? Ni si quiera sé cómo me siento.  Pero… ¿Quién cojones te crees para entrar en mi vida cuando te viene en gana? El caso es que hay gente muy estúpida… Y yo soy una de ellas. Y vuelvo a tropezar con la misma piedra. Una y otra vez…

PD: FELIZ DÍA DE LOS INOCENTES!