[2] La princesa de la boca de fresa.

Después de días dando vueltas a la cabeza. Pensando en si hacer o no caso a su princesa. "Es una locura... no va a funcionar" Pero... tenía tantas ganas de volver a ver una sonrisa de los labios de su pequeña que no se lo pensó dos veces y se acercó a la agencia de viajes que había a la vuelta de la esquina. Había otro grave problema que se sumaba a todos los que ya tenía: el dinero. Sin dinero no había viaje y sin viaje no conseguiría volver a ser feliz. Aún así, pensó en pedir dinero a sus padres o, quizás... robárselo a Ainhoa...
A las ocho de la tarde llegó a casa. Al infierno. Y allí seguía ella, rodeada de miseria y odio. De humo y olor a alcohol. Rodeada, de todo, menos de felicidad. Luis decidió no cruzarse ninguna palabra con ella. Prefirió evitarla. Pero ella parecía que si que quería hablar.
- Me ha dicho la vecina del quinto que te ha visto en una agencia de viajes.
- Sí... bueno, solo me pasaba por allí. Ya sabes que me gustaría conocer las distintas partes del mundo.
Ainhoa tiró la botella de Vodka al suelo y se levantó bruscamente del sillón.
- Ni se te ocurra abandonarme. Te juro que te seguiré allá donde vayas. A mi los pringados no me dejan, soy yo quien deja a los pringados.
- Ainhoa... ¿Por qué lo haces?
- ¿A qué coño te refieres?
- A ti. A lo que estás haciendo en tu vida. A tu manera de despreciar a las únicas personas que podrían haberte querido en toda tu vida.
Ainhoa no pudo evitar soltar una lágrima de sus ojos.
- Lárgate de aquí. No quiero verte. Pero... recuerda. No lo hagas.
- ¿Hacer el qué?
- Irte. Porque te juro que me vengaría, aunque fuera lo último que  hiciera.
- No te entiendo... te pasas días y días diciendo que ojalá me muriera yo, y aquella a la que tú llamas "estúpida hija"
De repente, de un cajón de la mesilla que había al lado de la tele, Ainhoa sacó un arma.
- No voy a permitir que me dejes como una puta soltera amargada. Tú vas a seguir viviendo conmigo. Y te aseguro que como te vayas tu vida no mejorará. ¿Lo entiendes? Ahora vete ya de aquí, molestas demasiado.
Luis no tuvo otro remedio que largarse de aquel horrible salón. Cuando llegó a la habitación de su princesa, ella le preguntó:
- ¿Has ido a lo del viaje, papi?
- Mi niña... todavía no he tenido tiempo porque he estado muy liado. Pero cuando pueda iré, ¿vale? Aunque sea lo último que haga.
- Vale papá.
- Venga mi niña, ahora duérmete. Que mañana tienes que ir al cole.
- Vale. Papi...
- Dime, princesa.
- Te quiero. Gracias por ser tú.
Luis, con lágrimas en los ojos, contestó.
- Yo también mi Princesa de la boca de fresa[...]

¡Hola bloggers! Lo siento por tardar tanto en actualizar.  He tenido exámenes, algunos suspendidos (un 3 en mates) y otros no (un 8,5 en sociales) pero también es que últimamente paso poco tiempo delante del ordenador. Bueno! Mañana domingo me voy a Andorra. Sí, lo sé, llevo un mes de viajes. La verdad es que estoy contentísima. Me voy a esquiar con el colegio y hasta el viernes no vuelvo. Os mostraré las fotos que he hecho a lo largo de los cinco días :)

PD: cuando vuelva contesto a los comentarios que me quedan, lo juro

xoxo